Poemas de seducción

PRIMERA PUBLICACIÓN en forma de cuaderno de Rosina Conde, recoge una docena de poemas escritos en su mayoría en un lenguaje directo, desconcertante por lo fuerte, desusadamente vigoroso, en el que comienza por pedirnos que hagamos a un lado las palabras y la vergüenza ante la más rotunda sinceridad.

El lenguaje abierto, descarnado, en primera persona, sitúa en términos genéricos lo que es la mujer, la mujer eterna con sus virtudes y su poder del bien y el mal, y se hace referencia a lo humano universal de la maternidad, la muerte, lo terrible de la ciudad tumultuosa, la amistad, el erotismo fuerte, desprejuiciado y sin temor a la moralina, que va de lo tremendo a lo delicado.

Su último poema, “Canto marino”, el que más me gusta, tiene una sensibilidad típicamente amorosa a lo bajacaliforniano, en donde se entrelazan el amor y el paisaje bellísimo y tan propio de nuestra península. En mi opinión, es el más logrado y bello de los Poemas de seducción.

Rubén Vizcaíno Valencia